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19 junio 2006

El gaitero solitario y el dormitorio azul.

Acabo de volver del fin de semana mas sorprendente de mi viaje... me fui con un gaitero que tocaba en la calle, y de repente me encontre pintando una habitacion de color azul.

Respecto a la primera parte, he de decir que fue posiblemente la decision mas irresponsable y temeraria que he tomado en este viaje. El gaitero toca regularmente en una plaza de Sofia, y habia ido a escucharlo varias veces. Ademas habia hablado con el algo acerca de la musica bulgara, de las danzas, etc... me habia parecido un tipo interesante y "peculiar".
El caso es que el viernes, a eso de las nueve de la noche, va y me dice:" Manyana tengo un "meeting" en Stara Zagora donde tocare la gaita. Puedes venir conmigo y pasar el fin de semana en mi casa: seras mi huesped. Si quieres venir tienes que venir ahora conmigo a casa, porque manyana saldremos muy pronto". Le pregunte si era un concierto, y me dijo que no, que era una especie de encuentro de gente joven, algo de la nacion bulgara y de una escuela de supervivencia, que el mismo no sabia exactamente de que se trataba (una escuela de cabezas rapadas?).

Analicemos la situacion... Un tipo que toca la gaita en la calle, de aspecto zarrapastroso, con el que he hablado unos minutos, me invita a a ir con el a un encuentro de unas juventudes nacionales de una escuela de supervivencia. Por otra parte, la ultima vez que acepte una invitacion para ir a casa de un desconocido, acabe borracho en la cama con un hombre que se me queria follar (memorias de Grecia, otro viaje anterior). Nadie en su sano juicio diria que si, asi os podeis imaginar que acepte ir con el.
Tomamos un autobus (sin billete) hasta uno de esos barrios oscuros y destartalados de la periferia de Sofia plagados de enormes bloques-colmena de la era comunista. Mientras caminabamos, le pregunte-vives en uno de estos bloques?- y su respuesta me escamo un poco.
"Estos bloques no son viviendas para personas! Quien los construyo!? Son inhumanos! Solo un loco viviria en uno de ellos".
"Ya esta -me dije para mis adentros- ahora es cuando me lleva a su mansion de cartones, a su parque con techo de estrellas o a su cuchitril okupado. Quien me mandaria meterme aqui?"
Afortunadamente, mientras hacia estas cavilaciones, saco una llave y entramos en uno de esos almacenes humanos.
El entro primero en el apartamento. Le solto una parrafada a quien fuera, que no contesto. Entre en la estancia (pues el apartamento era de una habitacion), y vi una mujer sentada en un taburete con la mirada ausente (su esposa, me dijo). En la habitacion, un colchon viejo en el suelo, una cuna y un monton de peluches. Algunos libros amontonados y algun instrumento musical. Extendio una alfombra en el suelo, hizo un hueco entre los peluches y me dijo: "Puedes dormir aqui. Tienes la mejor companya del mundo".
Apago la luz y se acosto con su mujer. Yo me acurruque en la alfombra abrazando un osito, preguntandome como demonios habia llegado hasta alli (pues esta vez ni siquiera estaba borracho) y esperando que el proximo dia no me diera una sorpresa desagradable.