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24 agosto 2006

Encuentros casuales en Zagreb

Tras varios cambios de planes, finalmente sali el miercoles de Veles. Lleve a Sasko a Skopje (donde tenia que coger un autobus para Munich) y parti con intenciones de llegar a Ljubljana esa misma noche (1050km de nada).

La cosa empezo mal porque al poco de entrar en la autopista me encontre con un aparatoso accidente de camion: caravana enorme y finalmente la policia nos hiyo venir por donde habiamos venido y desviar el trafico por una especie de camino rural. Como imaginareis, desviar el trafico de una de las arterias principales de los balcanes (que une Grecia con el resto de la UE) por un caminillo conlleva un atasco garantizado, la cual es la mejor circunstancia para quemar un motor cuyo ventilador no funciona.
En ese momento, fruto de la necesidad, se me ocurrio la idea de quitar el fusible de la servodireccion y ponerlo en el circuito del ventilador (el viejo truco de transferir la energia del inversor de ziritrones a las pantallas delanteras). Pude proseguir la marcha, aunque en total perdio unas dos horas.

El caso es que en llegando a la frontera croata (en Serbia no me funcionan los mensajes) mande un mensaje a Mirela (mi contacto en Ljubljana) para advertirle de que llegaba esa noche. La respuesta fue que esa noche le venia muy mal... asi que decidi hacer noche en Zagreb (donde llegaria a eso de las 20h). Se me ocurrio mandarle un mensaje a una amiga que estaba haciendo un interrail por Europa del Este preguntando donde estaba, porque me sonaba que estaba por Sarajevo, o asi... Toma castanya que justo llegaba a las 20h a Zagreb.


Por cierto, se nota que esto ya es Europa. Zagreb es una ciudad agradable, pero paseando por sus calles uno se da cuenta que esta ciudad lo mismo podria estar en Francia o en Alemania.Ya he abandonado definitivamente los Balcanes (snif...).