Nihihiiii! Kronca!

Finalmente fui a la playa, cerca de Markopulo. Recibi la llamada de Roberto, y me dispuse a ir a buscarlo. Tras una curva de la carretera me quede con el sol de tarde de cara, y mientras me deslumbraba y me reacostumbraba, perdi vitales momentos en discernir que el coche que iba delante mio, en realida no IBA sino que ESTABA PARADO. La frenada fue absolutamente ineficaz dado lo deslizante del asfalto (de esos que tienen las piedrecitas pulidas de tantos coches que han pasado) y de repente estaba incrustado en el maletero de un Clio de color blanco.

Juramentos aparte, el tema fue relativamente tranquilo. No hubo heridos, llamamos a la policia, hicimos el parte, dimos los datos de la poliza... bueno, el otro conductor no, porque no tenia la poliza, y solo tenia un recibo caducado del seguro. Pero bueno, si lo empapelan por no tener el seguro en regla no es cosa mia. Lo que es cosa mia es pagar la factura del taller, que promete ser interesante. El cebollazo ha incrustado el radiador en el bloque motor, con lo que ademas de perder agua, el ventilador no gira.
Asi que mucho me temo que todos los planes presupuestarios para el resto del viaje se me acaban de ir al cuerno. Por otra parte, ahora tengo aqui al amigo que evidentemente ha venido a ver Grecia, no a ver talleres y esperar reparaciones...

Y no voy a dar mas detalles porque estoy de mala onda. Ya os contare cuando sepa como salen las cosas...

En Atenas: Victima de las huelgas aeroportuarias

Aqui estoy en Atenas, esperando a mi amigo de Barcelona que supuestamente tenia que haber llegado hoy a eso de las cuatro. Se supone que en algun momento sabra que pasa con su billete y cuando podra venir.
Entretanto, yo estoy aqui esperando. Me dedico basicamente a no hacer nada porque despues de tres meses que estuve viviendo aqui, ya he visto casi todo lo importante y no me apetece demasiado salir a explorar teniendo en cuenta que la temperatura supera los 30 grados desde las diez de la manyana. Supongo que manyana ire a la playa, a ver que hay en la costa de Atica opuesta a Atenas propiamente dicha (que por cierto esta cercana al aeropuerto, por si he de presentarme alli).

Hasta ayer (que me dedique fundamentalmente a conducir los 900 km que separan Atenas de Didimotijo) estuve con la familia de Vangelis en su pueblo, que esta en esa especie de cuerno del noroeste de Grecia que se interna entre Turquia y Bulgaria. Por cierto, fue una estupenda ocasion para recordar mis conocimientos de griego. Ya practicamente no me salen mas palabras en bulgaro (a excepcion de algunos "molya", que resulta mucho mas corto que "parakalo").

Y bueno, os dejo porque aqui hay una tribu de megamalakas adolescentes armando bulla que me estan poniendo de los nervios (hace un rato estaba jugando pacificamente a cibermatarse en red, pero ahora se dedican a gritarse "in vivo").

Cruzando la Raya

El dia 22, aparte de estrenarme cambiando una rueda pinchada en los pueblecitos esos tan bucolicos, hice algo trascendental: cruzar la raya.
El dia 22 pase la frontera entre Bulgaria y Grecia, entre el mundo eslavo y el griego pero sobre todo entre la europa excomunista y la union europea. En la carretera no se aprecia mucho la diferencia (aparte del material rodante), pero cuando he entrado en la casa de mi amigo, ha sido como un choque. Despues de tres meses en paises de ex-Yugoslavia y en Bulgaria, detalles como que el banyo este cubierto de azulejos en vez de tener el suelo de cemento o que haya una habitacion para cada miembro de la familia me parecieron cosa de lujo y opulencia.
Esa es una verdadera raya, que se acrecento por la noche. Por la noche fuimos a las fiestas de Asvestades, un pequenyo pueblo cercano a Didymotijo. Alli habia musica tradicional, gente comiendo en las terrazas y baile. Desde luego que me desahogue bailando, pero aun asi no podia dejar de sentir cierta tristeza por la recien abandonada Bulgaria.
Vi la misma gente, las mismas casas, la misma comida, la misma musica... pero en Bulgaria no hacen fiestas. No tienen gran cosa que celebrar, o en todo caso no tienen el dinero necesario. Desde luego, el sus pueblos tambien hubo cosas de estas, pero primero el comunismo (con la supresion de la religion, y por tanto de las fiestas locales) y luego la pobreza han acabado con casi todo. Hay algunos festivales, pero fiestas en cada pueblo... no.
Me acorde de Dolno Lukovo, que habia visto el dia anterior en mi expedicion a rincones remotos. Dolno Lukovo esta a tan solo un par de kilometros de la raya, pero la atmosfera es totalmente diferente. Alli, ancianos con pensiones de 30 euros mensuales trabajan sin parar para secar el tabaco que han cultivado, para cobrar un precio irrisorio por el (nada que ver con lo que se paga por una cajetilla en Espanya) y poder subsistir. Desde luego, acordarme de las viviendas vacias de Madjarovo, por poner un ejemplo menos remoto, tampoco cambia mucho el panorama.

Y entonces empece a pensar, que tiene Grecia tan diferente para merecer unas condiciones de vida mucho mejores que sus vecinos? Suerte historica, sin mas, como la que tenemos nosotros.

Rodopes Orientales y Tortugas

Despues de Plovdiv, decidi ir lentamente hacia Didimotijo (en Grecia), donde me esperaba Vangelis (otro amigo relacionado con los bailes, como no). Me introduje en un area que habia esquivado interiormente en mi anhelo de ver el Mar Negro. Los Rodopes orientales son como un equivalente bulgaro de Teruel: apenas existen (desde luego en mi guia no existen).
Tras ver algunas ruinas tracias mas me dirigi hacia Madjarovo, que segun me habian dicho alberga un centro de conservacion y recuperacion de buitres y otras aves carronyeras. Madjarovo, por otra parte, es un pueblo ex-minero que albergaba 10000 almas cuando la mina funcionaba y que ahora no pasa de 500 habitantes (vamos, que es una especie de pueblo fantasma).
Fui al centro de recuperacion de aves, y resulto ser un rincon muy agradable, con su terraza entre los arboles, restaurante, y zona de acampada libre. Mas aun, alli se aloja un ingles muy simpatico que pretende hacer un estudio de un par de meses sobre las diferencias de habitat de dos especies de tortuga terrestre.
Total, que entre lo agradable del sitio, lo reducido del presupuesto y lo interesante de la companyia, me quede alli tres dias: uno para zanganear, otro para acompanyarlo a buscar tortugas (aunque no encontramos ninguna), y otro para ver pueblecitos perdidos en la montanya. He de decir que este ultimo punto resulto particularmente gratificante.

Otra vez en Plovdiv

Despues de un par de dias en Gabrovo, compartiendo experiencias como cortar la lenya para la calefaccion durante el invierno (aqui inventos como el gas-oil o el gas natural son inalcanzables), finalmente volvi a proseguir mi ruta. La idea era ir a Lovech y a Troyan (sede del 3er monasterio mas importante de Bulgaria, para finalmente ir a los rodopes orientales y pasar a Grecia.
En el monasterio no habia sitio para dormir, asi que fui tirando para el sur, y acabe en Karlovo, que aparte de ser cuna de uno de los mas famosos revolucionarios de la historia turca, realmente es un pueblo agricola en medio de la nada. Pero vamos, alli, en el minusculo "hotel fani" (dos habitaciones y cuatro camas) conoci a un frances... y total que he acabado llevandolo a Plovdiv (que me caia de paso) y finalmente he decidido quedarme a pasar la noche.
Plodiv es una estupenda ciudad para pasear, y ademas hemos hecho (con un par de daneses del hostel), una excursion al monasterio de Bachkovo (el segundo monasterio de Bulgaria) y por las montanyas de alrededor. La verdad es que hemos congeniado muy bien y nos hemos reido mucho.

Y bueno, manyana empieza mi ultima etapa por Bulgaria... Ya os contare.

El Dormitorio Azul y el Cabecero Negro.

Despues de abandonar Shumen, me dirigi a Kotel (un pueblecito pintoresco), con intencion de acabar en Stara Zagora. Alli se suponia que iba a estar unos dias y dar un curso de bailes espanyoles, tal como habia quedado la otra vez que estuve. A estas alturas ya he visitado todo lo fundamental de Bulgaria y mi idea es hacer tiempo hasta que llegue Roberto (un amigo de Barcelona) a Atenas y nos vayamos de ruta por Grecia.

Para empezar, dire de Kotel, un pueblo ensalzado por la Lonely Planet como rival de Koprivshtitsa, que realmente no tiene mas que un par de calles majas, y que el pueblo en si no tiene nada de interes. Pero a los pocos quilometros me encontre un cartel de "Reserva Arquitectonica" apuntando a un pueblecito llamado Geravna, que aunque no figura en ninguna guia, realmente vale la pena. Todo con casas tradicionales de madera, con tan solo un par o tres de mejanas, y donde se puede oir aun el canto de los burros y el rebuzno de los gallos. Tanto me gusto (y tan barato alojamiento encontre) que decidi quedarme a pasar la noche.

Cuando al dia siguiente fui a parar a Stara Zagora, hablando con Leda me entere que, siguiendo con la habitual "eficiencia balcanica" (que no esta demasiado alejada de la "eficiencia iberica"), nada habia sido preparado u organizado. Ella habia delegado en otra persona que al parecer se habia ido de vacaciones olvidandolo todo. Por otra parte, seguian con reformas del famoso dormitorio azul, con lo que en vez de bailar, estuve el primer dia dedicandome a la limpieza y repintado de una antigua cama de hierro. Por otra parte, y debido al curso de las reformas, el segundo dia fui "invitado" a abandonar Stara Zagora puesto que "no podian atenderme" como se debe atender a un huesped.

Asi que buscando rapidamente donde ir a parar, acabe de nuevo en Gabrovo. Explico todo el proceso porque cualquiera que siga mi trayecto en un mapa de Bulgaria, advertira que parezco estar resolviendo el problema de los puentes de Kaliningrado al reves (haciendo el mayor numero de kilometros y de cruces posibloes para no ver todos los puntos de interes). Tengo excusa: muchos de vosotros sabeis que he sido objeto de numerosos cambios de planes por parte de amigos y familiares que se iban a unir a mis pasos este verano.

Shumen y la Antigua Bulgaria

Por fin sali en direccion a Shumen, cuyo interes mas grande es que esta en el medio de los restos de unas cuantas grandes ciudades y vestigios del "Primer Imperio Bulgaro" (~680-1010): Veliki Preslav, Pliska, Madara y la antigua Shumen propiamente dicha.
La guia decia que no habia gran cosa que ver en Pliska y Preslav (las antiguas capitales del Imperio Bulgaro), puesto que aparte de algun trozo de muralla reconstruido (con un estilo que parece sacado del Exin-castillos, por cierto), lo mas que se podia ver era unos cuantos muros de un palmo de alto esparcidos por un campo. He de decir que para un veterano jugador de rol acostumbrado a imaginarse los mas majestuosos palacios a partir de cuatro rayajos en un trozo de papel, la vision de muros de un palmo de alto suponen una vivida e impactante experiencia. Las dos ciudades me impresionaron mucho, y no en vano se supone que en su tiempo de esplendor rivalizaban con la misma Bizancio (de hecho alla por el siglo IX Bulgaria era el estado mas poderoso de Europa)... Lamentablemente a los bizantinos no les hacia mucha gracia, y cuando tuvieron la oportunidad tomaron, saquearon e incendiaron ambas ciudades (acabando con el Primer Imperio Bulgaro, por cierto).
En cuanto a Madara, que es "una pieza de arte medieval unica en Europa", pues no me dijo gran cosa. Se trata de un relieve en un risco rocoso que representa a un hombre a caballo acompanyado por un perro. El relieve esta muy erosionado, y ademas la figura no es particularmente grande (poco mas que tamanyo real), asi que es "unico" solo porque a nadie mas en Europa medieval se le ocurrio hacerse un retrato de esta manera. Por cierto que en lo alto del risco hay otra fortaleza de esas de medio metro de alto, con unas vistas espectaculares.

Finalmente, en Madara encontre un camping tranquilo y sombrio. Ademas, como soy el unico cliente del camping, me dejan utilizar el cuarto de banyo privado del personal, asi que no resulta una experiencia tan alimenticia como los campings de la costa. Ademas cuesta la mitad, con lo que finalmente... me quede a dormir en Madara y no pude llegar a Shumen.

Hoy por fin he ido a ver Shumen, que aparte de otra ciudadela plana de esas para jugador de rol (mas impresionante todavia, los muros llegaban a medio metro, y en algun punto, metro y medio), tiene el museo arqueologico donde estan expuestos todos los hallazgos de las ciudades medievales de los alrededores. Ademas de tener unos estupendos campos de batalla para Warhammer y Warmaster (maquetas de las antiguas ciudades), realmente hay piezas muy interesantes, incluyendo joyas y un sinnumero de monedas.
Para acabar con la antigua Bulgaria, en Shumen hay tambien un monumento de estilo comunista conmemorando el 1300 aniversario de la creacion del primer imperio bulgaro. No se si realmente es bonito, pero desde luego es enorme, y ademas resulta muy curioso ver las esculturas de los khanes bulgaros en ese estilo geometrico (a que el khan Boris I parece un Marine Espacial cagando?)

Pyce - Acogiendo

Despues de un par de dias en Silistra, me dirigi a Pyce (perdon, Ruse). La mitad de la gente (y de las guias) con las que habia consultado decian que es muy agradable, y la otra mitad que es una gris ciudad industrial a orillas del Danubio. Desde luego, no haria 200 kilometros para ir a Ruse, pero estando cerca, me decidi a ir. Ademas de camino a Ruse esta la famosa tumba tracia de Sveshtari, que es la mas grande (y bonita) jamas descubierta. Realmente impresiona, aunque la visita guiada impide extasiarse ante la imagen de las venerables piedras (y por supuesto impide hacer fotos).
En cuanto a Ruse en si, tiene un bonito centro peatonal, con casas de estilo centroeuropeo (igual que Silistra, pero mas grande), y una estupenda plaza mayor. Ademas me encontre con que en la plaza habia una banda de musica tocando piezas de folklore del norte de Bulgaria (particularmente Rusenskos y Dunavskos, o como dicen algunos, "hiperpasodobles"). Nadie bailaba, pero igualmente fue muy agradable.
Al dia siguiente sali con idea de dirigirme a Shumen, pasando por el parque nacional "Rusenski Lom", en el que hay unas cuantas iglesias excavadas en la roca, los restos de una ciudad medieval, y una preciosa caverna. El caso es que en una de las iglesias me encontre con una pareja de italianos mochileros (de esos que viajan caminando y en autobus), y accedi a llevarlos a los otros lugares del parque... Total que me aficione a la companya "hogarenya" (vale, los italianos no son exactamente como los espanyoles, pero en comparacion con los bulgaros, son como de la familia) y acabe pasando el dia con ellos y llevandolos a Veliko Tarnovo (exactamente a la misma distancia de Shumen que cuando sali de Ruse por la manyana). Pero bueno, Veliko Tarnovo es una ciudad encantadora que se puede visitar dos veces sin sufrir.

Por cierto, que con ellos tuve la ocasion de utilizar el unico idioma que se que todavia no habia utilizado en mi viaje: el catalan (que resulta muy parecido al el dialecto de Ancona).

Silistra - Acogido

Va con unos cuantos dias de retraso, pero empiezo por el principio.
Por fin sali de Varna, en direccion hacia Silistra, en el ultimo cachito de Danubio que tiene Bulgaria. Silistra es un simple pueblo agricola lejos de todo y sin ningun monumento especial, pero alli habita un americano que conoci en el "Sofia Hostel" (el que llevaba anyos ensenyando ingles) y que me dijo que pasara a visitarlo. Ademas pense que seria un estupendo interprete para arreglar el tema de los frenos.

De camino, me encontre con un minusculo cartelito que indicaba un complejo tracio de cuevas-templo, y decidi acercarme. Nada del otro mundo aparte de centenares de lagartijas tomando el sol en las rocas, pero de vuelta del complejo a la carretera principal decidi pararme en la aldea de al lado a hacer fotos de casas tipicas. En esto que de una de las casas sale una "baba" (abuela) y me empieza a hacer senyas.
Lejos de estar molesta, la senyora (Penka) estaba encantada de que su casa fuera interesante para un turista venido del mundo exterior (es mas, me pidio que le hiciera fotos a ella misma), asi que me hizo pasar adentro. Me ensenyo las habitaciones (que eran tan tipicas y tradicionales como el exterior), y luego insistio en invitarme a tarta y un refresco. Alli tuvimos una de esas conversaciones tipicas con los lugarenyos, que incluyen forzosamente las "Tres Grandes Preguntas": De donde vienes? Como es que sabes bulgaro? No estas casado? Sin embargo esta charla fue un poco mas larga de lo usual, y comentamos temas tan interesantes como la diferencia salarial en ambos paises, o la existencia de moscas en ambos paises. Finalmente quedo tan encantada que insistio en regalarme un sirene (queso fresco) hecho por ella asi como varios kilos de albaricoques de su huerta. Me encanta este tipo de experiencias...

Una vez en Silistra me encontre con Rob, que aunque menos entranyable que la "Baba Penka", resulto ser un estupendo anfitrion. Me ensenyo Silistra (que tiene un estilo "europeo" marcadamente diferente de otras regiones de bulgaria), y sobre todo me ayudo con el tema del taller y los frenos, aunque ello implicara recorrer toda Silistra buscando pastillas para un modelo de coche tan exotico (en Bulgaria) como el mio. He de decir que contribuyo mucho a tener una estancia amigable (pues antes apenas nos conociamos) el hecho de que el fuera un apasionado de Hemingway y los Sanfermines, asi como de los juegos de ordenador y de rol (cuando dos frikis se encuentran en un lugar tan remoto como Silistra, la sensacion es indescriptible).

En la foto: Los tranquilos paisajes de Dobrudja.

Mas abuelo Cebolletsky

Finalmente me he quedado un par de dias mas en Varna, fundamentalmente dedicados a escuchar las interminables batallitas del abuelo Cebolletsky. Por ejemplo ahora se que fue amenazado y apalizado por la Sekuritat bulgara, tras lo cual hizo una obra de teatro denunciando el caso, o que su hijo desaparecio en extranyas circunstancias y aparecido muerto cinco dias despues en la playa de Kavarna (70 km de distancia contra la corriente marina predominante). Todo esto me lo conto en una excursion que hicimos a Balchik (donde hay un bonito palacio con jardines de la reina de Rumania entre las dos guerras mundiales (en que Dobrudja estaba bajo control rumano). El lugar es francamente bonito y agradable, aunque todo es asombrosamente caro y turistico para el promedio bulgaro. Tambien visitamos a media docena de familiares, y vimos el lugar donde aparecio el cadaver de su hijo... Una curiosa excursion, desde luego.

Ademas, ayer por la noche me alojo en casa del hijo de su cunyado, al cual al parece no habia avisado. Segun he podido comprobar conversando con sus familiares, las batallitas que cuenta son verdaderas, y el lo que realmente es una excentricidad es que constantemente trae invitados desconocidos. Lo malo es que los trae a casa de su ex-mujer, ya que el vive en un cuchitril (de que me suena eso? sera una costumbre bulgara?).


Y ahora, para acabar, un pequenyo juego matematico:

En un hostel de Varna se alojan cuatro suecas, una de las cuales tiene la misma edad que las otras sumadas menos un lustro. Sabiendo que tres de elles tienen la misma edad y que mi ultima noche en el hostal estuvimos en el bar del mismo tomando unas birras, cual de las suecas se me insinuaba y me intento meter mano?

El abuelo cebolletsky

Tal como os comente, quede con un senyor de avanzada edad que conoci en Sofia, en una de las sesiones de gaita.
Nos vimos por la tarde, y me estuvo explicando batallitas hasta practicamente la media noche. Me dijo Peter que el buen hombre descarrila un poco y se inventa cosas, pero casi que asi tendria incluso mas merito, por la imaginacion brillante y conseguida coherencia del relato.
Segun me dijo (Lazar), fue huerfano, luego adoptado por una familia rica (antes del comunismo, claro). Gracias a ello tuvo acceso a una excelente educacion, y posteriormente aprendio otros idiomas a lo largo de su vida: frances, checo, aleman, hungaro y turco. Estuvo trabajando en la embajada en Argelia, como interprete, y luego como profesor de frances en Varna.
Como profesor, conoce a muchisima gente en la ciudad, y ha insistido en presentarme a unas cuantas personas. La pena es que todas las "belles filles" que pensaba presentarme estan casualmente fuera de la ciudad, por lo que solo me ha presentado a sus conocidos de restaurantes y a sus colegas de trabajo (que son de su quinta, logicamente).
Vamos, resulta entretenido... manyana ire a verlo cantar a un coro de una iglesia, y luego supongo que abandonare Varna. La pena es que hoy... no tengo ni la mas remota idea de que hacer.

Y para acabar, tres notas breves:

1- Por los ruidos que hace Tomas, sospecho que se le estan acabando las pastillas de freno. Manda narices, porque lo lleve a revision antes de partir, y les dije explicitamente en el taller que iba a hacer un viaje largo, y que me miraran y cambiaran todo lo que pudiera fallar proximamente.

2- Una sonriente camarera de una terraza a la que he ido varios dias se ha transformado en iracundo basilisco cuando le he preguntado a que hora acababa el trabajo. Hay que ver que mala leche, ni que le hubiera metido mano!

3- Me he dejado las gafas en la fuente de aguas minerales al lado de la playa de Varna. Lamentablemente, Bulgaria no es la clase de pais donde cuando vuelves cinco minutos despues, las gafas siguen ahi. Toca las narices abundantemente, puesto que no son gafas de sol, son graduadas y muy utiles para conducir (y leer los carteles en cirilico). Ademas, no se que provecho les van a sacar a unas gafas para miopia-astigmatismo diferente en cada ojo. Mucha punteria que encuentren a alguien con los mismos defectos visuales que yo.